miércoles, 17 de agosto de 2011

15M y la No Violencia Activa

Por Curro Hernanz Marín, el Martes, 16 de agosto de 2011 a las 12:15

Texto que ha circulado por las listas del movimiento 15-M con motivo de un debate en torno a la no violencia

la necesidad irreversible de destrozarlo todo

de destrozarlo todo

de destrozarlo todo y a todos

destrozar a los hombres

destrozar a las mujeres

destrozar hasta el destrozo total

pero eso sí

destrozar sin apariencia de destrozo

destrozar sin apariencia de destrozo alguno

destrozar a alguien y que este alguien siga intacto / aparentemente

destrozar sin destrozar es la mejor destrucción”

(Esteve Graset)

El 15-M es un movimiento noviolento. Es algo que está tan en su esencia que ni siquiera ha sido una decisión tomada en asamblea: va de suyo, se ha impuesto como una pura evidencia. No decidimos nuestro ADN, partimos de él.

Tan fuerte es esta “decisión no decidida” que nadie por ahora la ha contravenido, a pesar de las provocaciones, los desalojos, las palizas. (Hay otras “decisiones no decididas” que son de todxs conocidas: ser un movimiento horizontal, inclusivo, respetuoso, sin representación, no querer nada con siglas y con partidos políticos, etc.).

La noviolencia no significa noconflicto. Hemos ocupado plazas, nos hemos manifestado sin permiso, hemos bloqueado desahucios, hemos echado a la policía de los barrios… Es decir, la noviolencia del 15-M no es pasiva, no es acatamiento de la legalidad ni asunción de los términos convencionales de la política, sino que es activa, rebelde, desobediente y creativa.

La opción por la noviolencia no es una opción por rehuir el conflicto, sino por plantearlo en los propios términos, escogiendo los escenarios y marcando los ritmos.

De hecho, el 15-M ha podido hacer lo que otros movimientos más “radicales” llevan años intentando sin ningún éxito. Es cuestión de fuerza. El movimiento 15-M tiene la fuerza que otros movimientos no tuvieron.

¿Qué significa tener fuerza? Tiene fuerza quien puede alterar y modificar la realidad, cuestionar las agendas dominantes e im-poner los propios problemas, hacer ver lo que se quería ocultar y decir lo que está prohibido decir, transformar las vidas, los lazos y las vibraciones entre los seres humanos.

Violencia y fuerza no son sinónimos. La fuerza que unx tiene no se mide por el nivel de violencia que puede ejercer. La fuerza del 15-M pasa (entre otras muchas cosas) por su capacidad para acoger la pluralidad, llevar la iniciativa y ser imprevisible. Si el movimiento 15-M ha “decidido” ser noviolento es porque intuye muy claramente que las acciones violentas -agresión, intimidación o amenaza, disturbios y enfrentamiento con la policía- debilitarían esas tres claves de su fuerza.

El poder lleva buscando clarísimamente imágenes de disturbios desde el primer desalojo de Plaza Cataluña: son imágenes mil veces vistas que confirman todos los clichés que dividen y aislan a los que protestan del resto de la población. El movimiento ha sido súper-inteligente al desertar continuamente de los escenarios que nos preparan y en los que nos esperan. Nos salimos por la tangente. Resulta llamativo que desde el interior del movimiento todavía haya quien esté dispuesto a proporcionar al poder político y mediático las imágenes que está pidiendo para erosionar el

apoyo social y la legitimidad ancha del 15-M.

Nos salimos por la tangente porque no queremos que nos empujen a la ya muy conocida espiral de represión/detenidos/heridos/miedo/rencor/reacción/campañas antirrepresivas, donde perdemos toda la iniciativa para seguir haciendo preguntas a la sociedad sobre cómo queremos vivir juntos, cómo queremos gobernamos, qué se hace con la riqueza que producimos entre todos, etc.

La violencia nos hace previsibles: refuerza las posiciones y los roles (policía represor/manifestante víctima). Llamar “hijo de puta” a un policía confirma la situación y el reparto de los papeles. Cada cual ya sabe quién es, qué identidad tiene y qué debe sentir hacia el otro. Seguramente no es algo muy grave, pero tampoco tiene nada de subversivo. Por el contrario, los gestos que hemos visto a menudo en las manifestaciones del 15-M de interpelar positivamente a la policía, con formas de comunicación irónica o empática, descolocan la situación: desconciertan, incomodan e inquietan, interrumpen los automatismos, cuestionan los clichés, hacen preguntas, cortocircuitan lo previsible, lo que cada cual sabe que tiene qué pensar, hacer y sentir.

Nosotrxs frente a la policía. La policía frente a nosotrxs. Es una imagen demasiado cómoda de lo que hacemos, es una línea de separación demasiado simple. Nuestra lucha no es así. El enemigo con el que nos batimos es una “lógica” que, en primer lugar, nos atraviesa a nosotros mismos (por ejemplo, en las mil decisiones cotidianas por las cuales sostenemos este sistema del que formamos todxs parte porque no hay ningún afuera). Hay una gran “potencia de humanización” en el movimiento 15-M. Decimos que somos seres humanos y no mercancías en manos de políticos o banqueros. Por la misma razón, podemos pensar que un policía es mucho más que su “función” y dirigirnos así a su humanidad (cuando tratamos de entablar diálogo o les recordamos que ellos también están hipotecados, pero también cuando les gritamos “vergüenza” ante un desahucio o una redada).

¿Violencia y no violencia son compatibles? La experiencia dice que la violencia se coloca siempre en el centro de lo que ocurre, como si fuera un torbellino que succiona y arrastra todo lo demás. La noviolencia puede expresarse de muchos modos, la violencia sólo de uno. En las acciones noviolentas cabe mucha gente distinta, en las acciones violentas siempre participa un tipo de gente muy determinada (hombre, joven, con papeles, etc.). Queremos afirmar, tanto en las formas de organización como en los modos de estar en la calle, los rasgos de nuestro ADN: horizontalidad, apertura, multiplicidad.

Perder la iniciativa, perder la pluralidad, perder la imprevisibilidad implica perder la fuerza. Fuerza es radicalidad. La noviolencia es lo que nos ha hecho y nos hace más fuertes y más radicales. Destrozar sin destrozar es la mejor destrucción.

Referentes de la No Violencia a nivel internacional (para futuras ampliaciones y estudios)

Mohandas Karamchand Gandhi (Porbandar, 2 de octubre de 1869 – Nueva Delhi, 30 de enero de 1948) fue un abogado, pensador y político indio.

Martin Luther King, Jr.1 (Atlanta, 15 de enero de 1929 – Memphis, 4 de abril de 1968) fue un pastor estadounidense de la iglesia bautista2 que desarrolló una labor crucial en Estados Unidos al frente del Movimiento por los derechos civiles para los afroamericanos y que, además, participó como activista en numerosas protestas contra la Guerra de Vietnam y la pobreza en general.

Lev Nikoláyevich Tolstói (cirílico ruso Лев Николаевич Толстой), también conocido como León Tolstói (Yásnaya Poliana, 28 de agostojul./ 9 de septiembre de 1828greg. - Astápovo, en la actualidad Lev Tolstói, provincia de Lípetsk, 7 de noviembrejul./ 20 de noviembre de 1910greg.) fue un novelista ruso ampliamente considerado como uno de los más grandes escritores de occidente y de la literatura mundial.

John Winston Ono Lennon, MBE (Liverpool, Inglaterra, 9 de octubre de 1940 – Nueva York, Estados Unidos, 8 de diciembre de 1980) fue un músico multiinstrumentista y compositor inglés que saltó a la fama como uno de los miembros fundadores de The Beatles

Gottfried Wilhelm Leibniz, a veces von Leibniz1 (Leipzig, 1 de julio de 1646 - Hannover, 14 de noviembre de 1716) fue un filósofo, matemático, jurista, bibliotecario y político alemán.

Silo —seudónimo de Mario Luis Rodríguez Cobos (Mendoza, 6 de enero de 1938 – Mendoza, 16 de septiembre de 20102 )— fue un autor argentino y fundador del Movimiento Humanista. Conferenciante muy activo, escribió libros, cuentos, artículos y estudios relacionados con política, sociedad, psicología, espiritualidad y otros temas.

Henry David Thoreau (Concord (Massachusetts), 12 de julio de 1817 - 6 de mayo de 1862) fue un escritor, poeta y filósofo estadounidense, de tendencia trascendentalista y origen puritano, autor de Walden y La desobediencia civil.

Saint-Simon (1760-1825) era un sociólogo francés que creó un sistema industrial en el que los cristianos intentaban mejorar la situación de los pobres a través de métodos no violentos.

Bertrand Arthur William Russell, 3er Conde de Russell, OM, MRS, (18 de mayo de 1872, Trellech, Monmouthshire, Gales - 2 de febrero de 1970, Penrhyndeudraeth, Gales) fue un filósofo, matemático y escritor británico.

Erich Fromm (n. 23 de marzo de 1900 en Fráncfort del Meno, Hesse, Alemania - 18 de marzo de 1980 en Muralto, Cantón del Tesino, Suiza) fue un destacado psicoanalista, psicólogo social y filósofo humanista estadounidense

H.G.Wells (1866-1946) Escritor ingles y pacifista, pionero al cuestionar en sus obras los límites éticos de la ciencia y la tecnologia.

Links relacionados

http://es.wikipedia.org/wiki/No_violencia

http://www.intermonoxfam.org/es/page.asp?id=2217

http://www.noviolenciayaccionsolidaria.com/

http://www.un.org/es/events/nonviolenceday/